La sección ecuatoriana de la cuenca amazónica, comúnmente conocida como El Oriente, o región Amazónica, es uno de los destinos más emocionantes del país. Aquí se puede remar en canoa para acercarse a los caimanes que merodean en lagos de aguas negras, avistar osos perezosos de dos dedos y monos aulladores, pescar pirañas y explorar un territorio con una flora virginal e insólita. Por la noche, tras superar el temor a lo que pueda andar cerca, el viajero se duerme acunado por una psicodélica sinfonía de insectos y ranas.